CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El debate sobre la detención de familias migrantes subió de tono este miércoles, luego de que un niño falleció poco después de ser liberado de instalaciones del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) de Estados Unidos en Texas.
De acuerdo con un despacho informativo de la agencia Associated Press (AP), la Asociación Estadunidense de Abogados de Inmigración indicó que había recibido información sobre la muerte de un menor al poco tiempo de que abandonó, junto con sus padres, el centro de detención familiar del ICE en la ciudad de Dilley, Texas.
El grupo jurídico señaló que supo de la muerte a través de una persona que estaba en contacto con la familia.
Human Rights Watch y un grupo de abogados que representan a las familias en el centro de detención indicaron que no tienen información sobre si la muerte del menor se debió a algún tratamiento médico que recibió mientras estaba bajo custodia.
El ICE rechazó un reporte inicial sobre la muerte del niño en Dilley y afirmó que estaba investigando el caso.
“Estamos investigando el informe de la muerte después de la custodia, pero sin ningún detalle sobre quién era, no podemos proporcionar nada más en este momento”, precisó un vocero del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas.
